Si algo le faltaba al rechazo nacional (de la mayoría no kirchnerista), al proyecto de ley “a su medida” de la ex presidenta Cristina Elisabet Fernández de Kirchner, era introducir una cláusula que que en un principio controlaría las libertades de expresión a los medios de prensa, y que por analogía podrían aplicarse a las redes sociales, blogs y hasta a las manifestaciones populares de protestas.
Anoche se conoció el “dictamen secreto” de la presidenta del senado, quien habría instruido a Oscar Parrilli que agregara la palabra “mediático” al artículo 72 inciso e), con la obligación de:
“Comunicar en forma inmediata al Consejo de la Magistratura de la Nación cualquier intento de influencia en sus decisiones por parte de poderes políticos, económicos o mediáticos, miembros del Poder Judicial, Ejecutivo o Legislativo, amistades o grupos de presión de cualquier índole, y solicitar las medidas necesarias para su resguardo”, según el texto introducido.
La versión que tenía el proyecto a las pocas horas de ese agregado aún más inconstitucional, solo hablaba de “poderes políticos o económicos, miembros del Poder Judicial, Ejecutivo o Legislativo, amistades o grupos de presión de cualquier índole”.
¿Alberto Fernández lanza un DNU (Decreto de Necesidad y Urgencia) contra el Grupo Clarín?
(sino lee el contenid, presione sobre el mismo)
Los números en la Cámara de Diputados para la reforma judicial, no le estarían dando hoy el quórum necesario a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, para lograr que el Congreso le apruebe una ley “a su medida”.
Legisladores de las provincias de Córdoba y Entre Ríos no estarían dispuestos al acompañamiento, el que no tendría tropiezos en el Senado donde “reina tras las pantallas de Zoom”.
Hace minutos se conoció un posteo (hilo) en Twitter del presidente Alberto Fernández anunciando el envío de un “DNU” en el que se consideran actividades esenciales a la telefonía celular, televisión por cable e internet.
Merece un estudio mayor (tiene sólo una hora de publicado), pero en principio se vería perjudicado el “Grupo Clarín“, contratos ligados con el fútbol con Fox Sports y TNT Sports y hasta la empresa de telefonía Claro propiedad del titular de la Fundación Slim que justo está comprometida con el desarrollo de la vacuna contra la Covid-19.
El anuncio de hace unos minutos en Twitter podría tratarse de una presión o de una revancha de Cristina Fernández de Kirchner, quien parecería estar solo interesada en sus causas judiciales y que sigue sin hablar de la pandemia.
¿Es constitucional el DNU de Alberto Fernández? En un principio parecería que no.
Otros tiempos. Pero fue solo hace meses. El CEO del “Grupo Clarín“ Héctor Magnetto escuchando y cenando con Alberto Fernández
Hasta pronto !
@JorRausch ©️
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