EEUU: diez días de tensa espera en una elección que ya está sucia. El poder decidió cambiar a Trump
Dentro de un mes los electores deberán reunirse y elegir a Joseph Robinette Biden Jr., más conocido como Joe Biden, como el nuevo presidente electo de los EEUU. Antes del 14 de diciembre próximo, el presidente Donald Trump habrá reconocido su derrota (aunque difícilmente utilice esa palabra) o la Corte Suprema habrá dado curso a las múltiples denuncias de fraude presentadas por los republicanos, aunque esta última opción es alejada por la brutal presión de las corporaciones mundiales que ordenaron a sus mandatarios a reconocer a Biden como el ungido.

También por primera vez en la historia del gran país del Norte la vicepresidencia será ocupada por una mujer. Kamala Harris puede tener un rol más preponderante dentro de la Casa Blanca que el esperado ya que Joe Biden asumirá el cargo con 78 años de edad (los cumple el 20 de noviembre) y los años han hecho mella en su vitalidad física y psíquica. No sería de extrañar que promediando el año 2022, Kamala Harris se transforma en la primera mujer en ostentar el máximo poder político de los EEUU.
De todas maneras eso de ostentar el poder pleno es relativo, por lo que se ha visto antes, durante y que parece durará hasta torcer la mano de Donald Trump. Las grandes corporaciones de medios de prensa, banqueros y demás miembros del ”establishment”; sumados a los saludos de jefes de Estados como objetos de presión, es una muestra más de por donde pasaría el poder real para los próximos cuatro años en los Estados Unidos.
Desde el Kremelin el presidente Vladimir Putin quien ocupa la presidencia de Rusia pero además ejerce el poder, ha manifestado que ”esperará la nominación de Biden” para saludarlo. Idéntica actitud sigue adoptando el presidente de México, Manuel López Obrador, ante los medios de prensa enojados con el mexicano de mantenerse fiel al protocolo y a su amigo Donald Trump, con quien firmó un tratado de Libre Comercio que incluye a la vecina Canadá, cuyo primer Ministro, Justin Trudeau actuó totalmente diferente. Desde Brasil, el presidente Jair Bolsonaro también ha optado por esta cautela.
De manera sorprendente Trudeau, y aún cuando oficialmente Joe Biden no tenía la mayoría de electores (los 270), junto al arco de los mandatarios socialdemócratas que también conforman Angela Merkel de Alemania y el premier francés Emmanuel Macron, decidieron reconocer el triunfo y cursaron felicitaciones a la fórmula Biden - Harris.
Es al menos extraño, también lo que hizo otro componente de ese grupo de socialdemócratas, y hablo del expresidente argentino Mauricio Macri. Fue llamativo su saludo efusivo a Biden, pensando en que no está en el cargo, y sobre todo por la gran ayuda que le prestó Donald Trump ante el FMI, para que pudiera terminar su mandato.
También recordamos la colaboración dispensada por Trump durante la búsqueda del Submarino ARA San Juan. Su gesto poco protocolar, dejó en evidencia su amistad con Barack Obama y su rechazo hacia quien pese a no darle un trato especial, cuando lo necesitó siempre estuvo.

También recordemos que Mauricio Macri agradeció los gestos de Donald Trump hacia la Argentina, como cuando necesitó el crédito del FMI de 46.000 millones de dólares y que le dio oxígeno para completar su periodo.
PARÉNTESIS: Recordemos que si bien fueron 57.000 millones de dólares, el último desembolso de 11.000 millones fue rechazando por el presidente Alberto Fernández al asumir, pero que sólo once meses después, anda rogando a la misión del FMI que se encuentra ahora en Buenos Aires, por unos 5.000 dólares para pagar intereses y así “estirar los pagos“ (pagos de intereses) Otra brutalidad del gobierno kirchnerista.

Además Trump hizo público su apoyo a un Mauricio Macri que recibía toneladas de piedras en el Congreso Argentino por parte del kirchnerismo chavista que buscaba derrocarlo mediante un golpe institucional.
El apoyo político y público de la potencia económica y militar más poderosa de la tierra, fue tan fundamental como el préstamo del FMI o la presencia de los máximos jefes de Estado durante la cumbre del G20 Argentina.
Tanto así que Macri lo llamó amigo y “lo valoramos mucho!”, según su respuesta en tuiter.

Para dejar atrás el tema doméstico, veamos el tuit efusivo de Mauricio Macri felicitando a Biden el pasado 7 de noviembre cuando dos cadenas de televisión lo dieron ganador al demócrata, y que luego debieron (en otro escándalo) quitarle los electores de un estado. Pero además Donald Trump, no había reconocido la derrota y no ha cambiado hasta esta hora, en que continúa tuiteando al sumar otro Senador.
Macri utilizó la palabra ”equitativo”. Mientras sea equidad en el desarrollo basado en el mérito, me parece correcto! Solo hago salvedades que nos ayuden a pensar, más cuando hablo de un expresidente a quien he votado en PASO y generales. Para que nadie se confunda. Y quien tenga dudas, puede leer otros artículos de este sitio.

Saliendo ya de la región y enfocándonos en EEUU, para mal de peores, al igual que Macri -por esas horas- Joe Biden recibió las felicitaciones del presidente argentino Alberto Fernández (quien escribió un deseo imposible) y también del narco dictador Nicolás Maduro de Venezuela, quien tiene pedido de captura de la Justicia de EEUU y a quien Donald Trump le puso las tropas militares del Comando Sur en aguas internacionales del caribe para evitar el narcotráfico.
Es decir que Mauricio Macri parecería estar asesorado por la socialista y su ex Canciller, Susana Malcorra, o actuó en su afán por ganar más espacio dentro de la Unión Cívica Radical (UCR) columna vertebral del frente electoral que lo llevó a la presidencia el 10 de diciembre de 2915.
Pero de una manera u otra, Macri tuiteó en sintonía con el kirchnerismo y el chavismo. ¿Y su gran amigo Trump? Bien Gracias!
La actitud de Mauricio Macri en términos políticos, además del apuro innecesario, contó con un poco de mala suerte. Aunque lo normal era que los kirch