Israel bajo un intenso fuego de Hamas. Pero el kirchnerismo de Argentina condena los ataques judíos
Actualizado: 11 may 2021
La “cúpula de hierro” sigue deteniendo como en los últimos días, una verdadera lluvia de misiles luego de una escalada que comenzó contra la ciudad de Jerusalén y que no tiene antecedentes en los últimos tiempos y ya está superando los incidentes de 2017. El gobierno de Fernández - Kirchner de Argentina ha condenado solo a Israel y no así al grupo terrorista Hamas que opera en la franja de Gaza y se esconden dentro de esa población.

Franja de Gaza
El Ejército israelí lanzó este martes 11 de Mayo más bombardeos en la Franja de Gaza luego de que milicianos palestinos dispararan cohetes hacia Israel en una escalada que ya dejó tres israelíes y alrededor de 30 palestinos muertos, incluidos diez chicos, desatada por una ola de violencia en Jerusalén.
Se informó también que dos mujeres israelíes murieron cuando cohetes lanzados desde Gaza cayeron en una zona residencial de la ciudad costera de Ashkelon, informó el servicio de socorristas de Israel.
Según la agencia de noticias AFP más de 60 israelíes resultaron heridos en otros ataques similares, al tiempo que la policía israelí informó que una tercera mujer falleció en la localidad de Rishon Letzion, cerca de Tel Aviv, por el impacto de otro cohete lanzado desde la Franja de Gaza.
NADA ES AL AZAR Como algo ya planificado desde antemano, los enfrentamientos comenzar este lunes en las afueras de la mezquita Al Aqsa, en la Ciudad Vieja de Jerusalén. Los palestinos arrojaron piedras a los policías antidisturbios israelíes, que dispararon balas de goma y gases lacrimógenos.
Desde la Media Luna Roja Palestina dijo que en los enfrentamientos del lunes en Jerusalén más de 300 palestinos resultaron heridos. La fuerza policial israelí dijo que una veintena de agentes resultaron heridos.
La mezquita Al Aqsa se sitúa en una explanada conocida para los musulmanes como Haram al Sharif, o el Noble Santuario, y por los judíos como el Monte del Templo.

La fuerza policial de Israel dijo que miles de palestinos se habían atrincherado en el lugar con piedras y cócteles molotov en anticipación de un enfrentamiento durante una marcha judía planeada para el lunes para conmemorar el Día de Jerusalén.
La llamada Marcha de la Bandera conmemora la captura de la parte oriental de Jerusalén por parte de Israel en 1967, cuando, durante la Guerra de los Seis Días, tomó el control efectivo de toda la ciudad.

En Jerusalén Oriental se asienta la ciudad vieja, donde se ubican algunos de los lugares religiosos más sagrados del mundo: la Cúpula de la Roca y la propia mezquita de Al Aqsa de los musulmanes, el Monte del Templo y el Muro de las Lamentaciones de la religión judía y el Santo Sepulcro de la religión cristiana.
Y es considerada la ciudad más sagrada para el judaísmo y el cristianismo, y es la tercera ciudad más sagrada del islam.

El destino de Jerusalén Oriental está en el corazón del conflicto palestino israelí, y ambas partes reclaman su derecho sobre ella. Israel considera a toda la ciudad como su capital, aunque no es reconocida como tal por la mayor parte de la comunidad internacional, y los palestinos reclaman a Jerusalén Este como la futura capital de un futuro Estado independiente.
Por lo general, durante la Marcha de la Bandera, cientos de jóvenes israelíes ondean banderas y se abren paso a través de áreas musulmanas, cantando canciones patrióticas, pero muchos palestinos lo consideran una provocación.
La policía israelí había tomado la decisión preve de prohibir que los judíos visitaran el complejo durante las conmemoraciones por el Día de Jerusalén.

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, defendió la actuación de los efectivos policiales.
"Esta es una batalla entre la tolerancia y la intolerancia, entre la violencia sin ley y el orden", dijo. "Los elementos que quieren expropiar nuestros derechos nos obligan periódicamente a mantenernos firmes, como lo están haciendo los agentes de policía de Israel".
Por su parte, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmoud Abbas, condenó las acciones israelíes.
"El brutal asalto de las fuerzas de ocupación israelíes a los fieles en la sagrada mezquita Al Aqsa y su explanada es un nuevo desafío para la comunidad internacional", dijo su portavoz Nabil Abu Rudeineh.

El desalojo de familias palestinas
Gran parte de la última ola de violencia se debe a un esfuerzo legal de larga data por parte de grupos de colonos judíos para desalojar a varias familias palestinas de sus hogares en el cercano distrito de Sheij Jarrah, en Jerusalén Oriental.
El fallo de un tribunal inferior este año que respaldaba el reclamo de los colonos desató la ira de los palestinos. El Tribunal Supremo de Israel debía celebrar una audiencia sobre el caso este lunes, pero la sesión se pospuso debido a los disturbios. Esta nueva oleada de violencia tiene lugar en los últimos días del mes sagrado musulmán del Ramadán.