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La prensa socialista ya habla de “subversión electoral” y adelantan “que Trump hará fraude en 2024”

En un reporte de la prestigiosa agencia de noticias AFP que se reprodujo en la red social Twitter - la gran sobreviviente de la jornada luego de las caídas de Facebook, WhatsApp e Instagram que salieron de servicio - recuerdan de manera brutal y con una falta total de independencia partidaria e ideológica, sobre que “Las elecciones presidenciales estadounidenses de 2000 dependieron de unos pocos votos en Florida”, agregando que “El concurso de la Casa Blanca de 2020 dio a luz a la "Gran Mentira" y vio a los partidarios de Trump asaltar el Capitolio de EE.UU.”. Como si fuese poco, rematan con un siniestro futuro afirmando: “Solo espere y vea lo que 2024 tiene reservado”.

No es cualquiera

El cable de la noticia capciosa y subjetiva, llama la atención porque proviene de la “Agence France-Presse (AFP)”, una de las agencias de noticias más antigua en el mundo y una de las mas grandes, junto con Reuters y Associated Press, tiene sede en París, con centros regionales en Washington D.C., Hong Kong, Nicosia y Montevideo, además de oficinas en otros 110 países.


En el enlace que se anexa al posteo en la red social “del pajarito” la nota lleva hacia el dispensario de noticias progresistas news.yahoo.com donde hace 48 horas Chris Lefkow escribió un artículo al que temerariamente tituló:Temores de 'subversión electoral' mientras Trump coquetea con la candidatura a la Casa Blanca en 2024”, el cual se ilustra con fotografías tipo ‘slider’ (deslizantes) siendo la segunda de cinco, la agregada arriba.

Recuerda además la afp.com una vez redirigiros el lector a Yahoo y remitiéndose a 21 años atrás, de que “La elección presidencial estadounidense de 2000 dependió de unos pocos votos en Florida y finalmente se decidió en la Corte Suprema”, asegurando de manera siniestra sobre que “El concurso de la Casa Blanca de 2020 dio origen a la "Gran Mentira" y vio a los partidarios del candidato perdedor irrumpir en el Capitolio de Estados Unidos”.

La traducción del artículo pro - socialista

“Solo espere y vea lo que 2024 tiene reservado”, advierten y expresan.


“Donald Trump, el primer presidente en la historia de Estados Unidos que se niega a aceptar el resultado de una elección, está coqueteando con otra carrera en la Casa Blanca en lo que podría ser un momento decisivo para la democracia estadounidense”.

“Robert Kagan, investigador principal de Brookings Institution, hizo sonar las alarmas en los círculos políticos la semana pasada con un escalofriante artículo de opinión sobre un escenario apocalíptico en The Washington Post”.


"Estados Unidos se encamina hacia su mayor crisis política y constitucional desde la Guerra Civil", escribió Kagan”.

“El académico neoconservador advirtió sobre una "posibilidad razonable durante los próximos tres o cuatro años de incidentes de violencia masiva, una ruptura de la autoridad federal y la división del país en enclaves rojos y azules en guerra".

“Las encuestas sugieren que la mayoría de los estadounidenses comparten al menos algunas de las preocupaciones de Kagan: el 56 por ciento de los encuestados en una encuesta reciente de CNN-SSRS dijo que la democracia estadounidense está siendo atacada”.

“El treinta y siete por ciento dijo que está siendo "probado". Solo el seis por ciento dijo que no corre peligro”.

“Las incesantes e infundadas afirmaciones de Trump de que la votación presidencial de noviembre de 2020 fue "robada" por el demócrata Joe Biden se han filtrado en el torrente sanguíneo político”.

“El setenta y ocho por ciento de los republicanos encuestados por CNN-SSRS dijeron que no creen que Biden ganó legítimamente la presidencia, una cifra en línea con los hallazgos de otras encuestas de opinión”.


"Es un fenómeno nuevo en las elecciones estadounidenses", dijo Edward Foley, profesor de derecho constitucional en la Universidad Estatal de Ohio.


"Ha habido peleas por colgar chads - como Bush contra Gore en 2000 - y ha habido recuentos desde que ha habido elecciones en Estados Unidos", dijo Foley.


"Pero la 'Gran Mentira' es algo nuevo. Está desconectado de la realidad y es una especie de patología social".

- 'Por cualquier medio necesario' -

“Richard Hasen, profesor de derecho y ciencias políticas de la Universidad de California en Irvine, dijo en un artículo de investigación reciente que Estados Unidos se encuentra en un momento de "peligro democrático", enfrentando un peligro sin precedentes de "subversión electoral".


"Estados Unidos enfrenta un grave riesgo de que las elecciones presidenciales de 2024 y otras futuras elecciones estadounidenses no se lleven a cabo de manera justa, y que los candidatos que asuman el cargo no reflejen las elecciones libres hechas por los votantes elegibles según las reglas electorales anunciadas anteriormente", Hasen. escribió.


“Trump, que mantiene un férreo control sobre los fieles republicanos y es casi seguro que será el candidato presidencial del partido si decide postularse, parece estar preparando el escenario para la "Gran Mentira 2.0", dijo Foley.


“La estrategia implica restricciones como las leyes de identificación de votantes aprobadas por las legislaturas de algunos estados liderados por republicanos que, según los demócratas, tienen la intención de suprimir el voto minoritario y los republicanos dicen que están diseñadas para proteger la integridad de la boleta”.

“También incluye reemplazar a los funcionarios electorales estatales republicanos como Brad Raffensperger, el secretario de estado de Georgia que se negó a hacer la oferta de Trump en 2020 y "encontrar" 11.780 votos, con candidatos que son partidarios acérrimos”.

"Una vez que tienes a esa persona a cargo tienes a alguien que tiene una gran influencia en cómo se llevan a cabo las elecciones, cómo se cuentan los votos, quién ha declarado el ganador, cómo se alinean los votos del Colegio Electoral", dijo Larry Sabato, director del Centro de Política en la Universidad de Virginia.

- 'La última perversión de la democracia' -

“Si bien provocaría la indignación demócrata, las legislaturas estatales controladas por los republicanos podrían ignorar el voto popular en sus